Page 16 - Canto del castaño
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Serie Adugo biri I 8 a a a a pelear y por lo tanto no pueden componer canciones de de guerra (awi marakã) Para ellas queda sólo el el terreno paródico de los cantos En este sentido las canciones chamánicas una vez que han sido entonadas por el peye pueden ser cantadas por cualquiera y prestarse a a a a a a a “variaciones jocosas” sobre todo entre mujeres y niños mientras que las canciones tradicionales de de de guerra pueden ser descontextualizadas y reutilizadas por ejemplo como como canciones de cuna La información como como señala Risério no no es es menor: “significa que las mujeres expulsadas del circuito «oficial» de de la creación crean dobles crítico- humorísticos de los textos canónicos” IV Uno de de de los momentos cruciales de de de la investigación de de de Viveiros gira en en torno al “Canto del castaño” entonado por el el indio Kãñipaye-ro en 1982 que el antropólogo utiliza para mostrar la complejidad del del agente enunciativo del del canto chamánico araweté: “saber quién quién quién canta quién quién quién dice qué a a a a a a quién quién quién es el problema básico” nos dice Viveiros ya que ese tipo de canto entre los arawetés “es una canción de canciones un un discurso de de discursos es polilógico” El “Canto del castaño” pertenece a a a a ã a a á a los Maî marakã lo lo que que significa que que el el chamán presenta el el canto pero éste pertenece a a a los dioses: “Viveiros cuenta que cuando habló con un un chamán sobre una canción que éste había cantado recibió esta esta respuesta: «No canté nada quien cantó 16 


































































































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