Page 394 - Muyurina y el presente profundo
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Serie Adugo biri I 15
estructuras enumerativas que había adquirido la composición: “las pobres” (v (v (v 8) “la “la cruz” (v (v (v 10) “el vaho” (v (v (v 11) implantando otra cadencia melódica a a a a a a a a a la la prosodia Aparecen las voces sirinu y y paititi todas ellas transcritas gráficamente en en letra cursiva y y además con su propia traducción o o ó o equivalente: “de paititi / el dorado” (v 35) Se da una tensión lingüística en en en la imagen: “veo “veo a a a a a dos” (v (v 1) “veo “veo a” a” (v (v 5) “simple vista” (V 6) —atiéndase cómo la la la la simpleza de de la la la la imagen de de la la la la visión impacta con la la la la complejidad de transcripción hasta la la la palabra con la la la utilización de de de varias lenguas incluso de de de manera conjunta y y alterna y y de de de otros procedimientos comunicativos— “veo la la laguna” (v 17) “a la vista” (v (v (v 23) “veo cada noche ” ” ” (v (v (v 28) “y veo”(v 32) “puede verse” (v (v 42) y finalmente “de los páxaros invisibles”(v 45) que rubrica la la paradoja de de ver lo invisible la la posibilidad de de ver “el canto” la la la música frente a a a a a a a a a la la la palabra Rowe describe esta dicotomía entre música y palabra desde una perspectiva de de de significación distinta:
La plenitud animada —en la fantasía se diría— promete la plenitud del sujeto y el el juego del sonido y el el ritmo sería modulación de de la la sensación-emoción subjetiva de de la la interioridad Para conseguir este último efecto en que el juego de sonido y ritmo materializa como una fantasía (musical) la 394