Page 536 - El cerebro ritual
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Serie Adugo biri I 19
impregna al cuerpo entero el contacto en en cada punto otorga placer” (Lal) Estas esculturas se disponían en en los los templos concediendo a a a las imágenes de contorsionistas un significado religioso espectacular (Toepfer 1988: 108) Cuán oportuno parece aproximar el tropo completo de las contorsionistas al al cuerpo cuerpo fetiche y también al al cuerpo cuerpo re- liquia si reparamos en todos los contextos eróticos y sagrados que se han discutido en algún punto de nuestro texto Una vez más evocamos el concepto de “operador simbólico” para adver- tir sobre aquello que que no no pertenece al binomio objeto / sujeto y que a a a a a a a menudo rebasa el significado “natural” pues sabemos que las las contorsionistas en en en las las representaciones occidentales eran apreciadas “según las habilidades de de la la intérprete para drama- tizar ideas simbolizar valores emocionales y evocar estructuras narrativas innovadoras que motivaran la acción” (112) Es mi parecer que estos elementos intervienen en en en en las transformacio- nes simbólicas tanto de de las asombrosas muñecas de de Mme Ska como como de de las las de de Bellmer En estos ejemplos las las muñecas como como partícipes ilustran no no solo la connotación sexual del cuerpo en contorsión sino también del cuerpo expuesto a a a posturas exter- nas y críticas No sorprende que Toepfer oriente su discusión a a a la la colección Die Puppe del libro de de de Bellmer en la la que el el el deseo lo sacro y el fetiche participan en en conjunto en en una dramatización
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