Page 272 - El cerebro ritual
P. 272
Serie Adugo biri I 19
El estudioso en religiones prehispánicas Alfredo López Austin define los centros anímicos yol yol yollo como una zona atribuida al al corazón y vinculada “a la la la la memoria al al hábito a a a a a a a a á a a a a la la la la afición la la la la voluntad a a a a a a a la la la dirección de la la la acción y a a a a a a a la la la emoción” (1980: 207) En lo concerniente a a a a a a a la la posición de la la entidad anímica el autor expone el el concepto del tonalli esencia particularmente vulnera- ble “frente a a a a a a a a a acciones maléficas la posibilidad de abandonar el cuerpo principalmente a a a a a a a causa de una fuerte impresión y la liga de afecto que que une a a a a a las personas que que lo comparten” (1980: 210) López Austin cita otra fuente donde se habla entre los habitan- tes de Francisco Tecospa sobre una una situación en en la que “una en- tidad que se se ha externado del cuerpo puede ser altamente nociva y dañar a a a a a a seres humanos ésta se se conoce como «aire de noche»” (1980: 257) En la la misma obra nos enteramos de de la la presencia de de tres almas en el individuo un grupo mixtecano (que habita la zona montañosa nororiental de de de Oaxaca) identifica a a a a a a a a a a a una de de de estas tres bajo el nombre de nagual conocido originalmente como ihiyotl (1980: 422-430) Hoy en en en día persisten dos creencias: la la del tonalismo y y la la del nagualismo Las personificaciones en en un un tonalismo o o o o o o en en un un nagualismo incluyen a a a a a a a los animales Bajo el el influjo del tonalis- mo el individuo recibe la identidad animal que corresponde a a a a a su nacimiento Aprovechando las artes del nagualismo el el hechi- cero puede introducir su alma en el animal esta transfiguración es temporal ya que puede elegir otro animal y y salir para adop-
272