Page 166 - Muyurina y el presente profundo
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Serie Adugo biri I 15
agarrándome de las manos con toda su fuerza me me dijo: “No te alejes de de mi lado tú también podrías perderte” Tanto mi padre como yo sabíamos bien que en en algún lugar teníamos que alcanzar a a a a a a a a a á mi madre y hermanas quizás cuando el día esté por por terminar por por eso sin saber qué hacer caminábamos muy tristes de un lugar para otro en aquellos lugares desconocidos para nosotros Compadeciéndose de de de mí mi padre me me me preguntaba a a a a a a cada momento: “¿Qué quieres comer? ¿Qué deseas deseas beber? Hijita ¿qué deseas?” ¿Cómo podría pensar en en en en comer o o o o o ó en en en en beber algo encontrándome en en en en tal situación? Al pensar en en mi madre se me me iban las ganas de comer no podía No sé cuánto tiempo habría pasado desde que salimos de de de Lima Por eso lloraba mirando a a a a a a a a mi mi padre pensando en en todas nuestras andanzas en en en nuestro sufrimiento en en en aquellos pueblos Después de de casi cinco horas de de viaje mi padre logró hacerme tomar una sopa para que no me me enferme Luego saliendo a a a a a a a a las afueras de Ica logramos subirnos a a a a a a a un camión y continuar el viaje Íbamos en la la la la parte de de atrás del camión mezclados con la la la la chala y otra clase de pasto para las las vacas Así llegamos a a a a a a a a a a a a Nazca Ahí tampoco nadie había visto a a a a a a a a nuestra familia Entonces mi mi padre por momentos entraba en en en en cólera y en en en en otros apesumbrado lloraba de de impotencia iba de de un un lado a a a a a a a otro porque no encontraba una solución y porque recién se estaba dando cuenta que que que aquello tal vez era era por su culpa Decidimos llegar de todas maneras a a a a a a a a a Chala en el mismo camión antes de que anochezca 166

































































































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