Page 164 - Muyurina y el presente profundo
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Serie Adugo biri I 15
sorprendida y un un poco triste le pregunté: “¿Dóndé están los camiones? ¿dónde está mi mi madre?” Y él muy tranquilo sin ninguna preocupación me dijo: “Se habrán ido por gasolina ya vendrán No te preocupes Aquí nomás vamos á á a a a esperarlos no no pueden abandonarnos” Pero yo sabía en lo más íntimo de mi ser que nos habían abandonado Jamás pensé que regresarían por nosotros Por eso me preguntaba a a a a a a mí mí misma: “¿Y qué es es es esto? ¡Madre mía!” Empezaba a a a á a a a a tener miedo Ni bien empezábamos a a a á a a a a viajar los problemas también empezaban a a a a a a a surgir Eso no estaba bien Nuestro viaje se estaba poniendo difícil Todo el tiempo había soñado llegar a a a a a a a á á mi mi pueblo ir a a a a a a a á á la quebrada que que está detrás de de mi mi casa y ahí subirme a a a a a a a a a a a a a a la la piedra grande para arrojar piedrecitas a a a a a a a a a a a a a a la la parte baja de la quebrada cuyo toc toc toc toc me gustaba escuchar Era canto canto dulce para mis oídos También deseaba oír el canto canto de de los pajaritos y el el el del kiskis que que anunciaba que que el el el día había llegado a a a a a a su su fin Pero estos sueños se estaban alejando de mí querían abandonarme Entonces una tristeza profunda empezaba a a a a a a a a a embargarme apretando mi corazón Tenía ganas de gritar a a a a a a a a a a a viva voz quería increparle a a a a a mi padre decirle: “Es tu culpa” pero todo esto se diluyó en mi garganta Había pasado ya una hora y y nadie regresó a a a a a a a a a a buscarnos pasaron dos tres horas tampoco apareció nadie Entonces mi tristeza se hizo más grande como la ira de de mi padre Recién ahí mi padre comprendió que efectivamente nos habían 164

































































































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