Page 94 - Arte, alucinación, primitivismo

Serie Adugo biri I 11
uno se rompe las piernas y nunca logra subir Para que Arp encuen- tre al señor Arp todo lo demás debe desaparecer: el el punto se se rebela contra el conjunto turbio Hay que decidirse a a a a a a a a a remedar a a a a a a a a a Dios y y a a a a a a a a a retratar las culeras del pantalón ó o o ó o a a a a a a destruirlas Es evidente que la la confección de de de de obras de de de de arte comporta muchos elementos de asesinato y crueldad Porque toda forma precisa es es es un asesinato de las otras versiones: la la angustia mortal hace que la corriente se corte Descomponemos cada vez más la la la realidad volviéndola cada vez menos obligatoria reforzamos la la la dialéctica de de nuestra existencia mientras que antes nos defendíamos de ella con dogmas religiosos ¿A qué equivale el neolitismo infantil de Arp al al mundo angustiado de de los animales de de Masson con sus significados totémi- cos o o o o o o o o o a a a a ese mundo X que por fortuna no podemos todavía definir y y que gracias a a a a a a a á a la ciencia se vuelve cada vez más lejano y y esotérico? (El sabio crea hechos precisos escamoteando el máximo de de experiencia pues nada desmoraliza más que que una verdad que que impide ver) El contemplador de de hoy no se compromete con con nada: busca la la la relajación y la la la renta psíquica que el el artista le ofrece servilmente Pero es es vil vil y cobarde reivindicar para sí una irrespon- sabilidad amablemente infantil y babear hablando de inutilidad como si lo demás fuera más más sensato Ese pequeño paraíso resulta fingido y esos fanáticos pretenciosos no se dan cuenta de que lo que reclaman es es la la la cobardía y la la la indecisión del tiempo espléndido de los peluches 94