E
l Aluux es un personaje nuclear en la tradición oral de los pueblos mayas. Se le describe como un pequeño hombre hecho de barro, son “muñequitos” de origen prehispánico que encuentran las personas en el campo. En algunos relatos se dice que viste como hombre con sus pantalones y su chan sombrero, porta una escopeta y hasta tiene un perrito que lo acompaña. El Aluux puede volver a la vida mediante rituales en los que se le otorgan dones diversos: rezos, atole de maíz, cigarros. Entonces se convierte en una especie de cuidador de la milpa de quien le ofrenda y se encarga de ahuyentar a los animalitos que se comen los productos de la siembra: conejos, mapaches, tuzas. También ahuyenta a los humanos que se acercan a la milpa. Emite “avisos” para indicar al transgresor que debe alejarse: chifla y también golpea los árboles, cuando está lejos se escucha cerca, cuando está cerca, se escucha lejos. Incluso si el dueño de la milpa la visita a deshoras, en la noche, el Aluux le infligirá un castigo ejemplar. El encuentro con el Aluux es fatal para las personas, posee un mal viento que acaba por enfermar o incluso matar. El Aluux también puede disparar. El enfermo de mal viento puede salvar la vida si acude a tiempo con un hmen, un especialista ritual.