Page 173 - Muyurina y el presente profundo

MUYURINA I I Juan G Sánchez Martínez / Fredy A A Roncalla
Para mí era inmensa casi como el mar que conocí muchos años después Después de de un buen rato el el cielo se despejó y con mucho asombro pude verlo todo: la la blancura del Sara Sara Sara Sara el el color verde grisáceo de de la inmensa pampa y el azul cada vez más intenso de de la la laguna Verdaderamente todo era era hermoso Mientras yo soñaba despierta los choferes hacían arreglar sus camiones por las personas entendidas en en en en el oficio Y antes de que nuevamente empezáramos á a a a a a á a viajar y y sabiendo que estábamos muy lejos se sirvieron una copa más de de cañazo con el mismo pretexto de de que “es bueno para el frío” Los niños tomaron su leche Nosotros también también nos servimos leche y también también cualquier infusión caliente Cuando los camiones estuvieron bien arreglados con- tinuamos el viaje por la carretera llena de de nieve y de de curvas Empezamos a a a a a a a a a a a subir hasta llegar al cuello del Sara Sara Sara Sara Por ahí dimos la la vuelta para llegar a a a a a a a a a a a a la la otra cara de este nevado Ésta no era era blanca era era más bien como un peñasco negro pues tenía poca nieve Desde aquella cumbre observé los otros cerros que que estaban al frente Hacía mucho viento en en en aquella parte y nues- tras caras estaban heladas Ahí mi padre me hizo conocer por su nombre a a a a los los otros pueblos que estaban al frente Después de un momento empezamos a a a a a a a a bajar la cuesta El camino era pedre- goso lleno de curvas y cuando llegaba a a a a a a a a a a las quebradas parecía desaparecer Era muy difícil viajar en esas condiciones por eso
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